Existen muchas sillas de oficina que pueden ayudar a promover una buena postura al sentarse, ya sea con un respaldo recto de 90 grados, por ejemplo.
Los dolores de espalda por malas posturas, casi siempre comienzan en la zona de espalda baja, por lo que, cuando se trata de alivianar la carga, el ángulo del respaldo es lo que podría determinar todo.
Según algunos estudios, sentarse en una posición vertical sin ningún grado de inclinación, produjo casi un 40% más de presión sobre los discos que sentarse en una silla reclinable con el respaldo en promedio con un ángulo de 110 grados.
En otro caso, se descubrió que trabajar parados o de pie produjo casi nada de presión sobre las vértebras. Se llegó a la conclusión de que, si se sufre de dolor lumbar, es muy importante que el trabajador se mueva, se levante o camine cada ciertos lapsos de tiempo.
En ese mismo caso, para los oficinistas que sufren dolor de espalda, específicamente en la zona baja, los resultados arrojaron que un ángulo de asiento un poco más reclinado, puede reducir el estrés y la presión ejercida sobre los discos para poder aliviar el dolor de espalda.
La ergonomía de las sillas reclinables hace de este mobiliario el mejor aliado para mantener la productividad del trabajador mientras se mantiene en el escritorio trabajando frente a una PC, redactando informes, atendiendo el teléfono y otras actividades de oficina.